Persiste discriminación en EU 90 años después

Jaime Torres

El Diario de El Paso

Feb 24, 2019

A pesar de los logros de las comunidades latinas en Estados Unidos la discriminación y el racismo aún están presentes, promovidos desde la Casa Blanca, algo que no se veía desde hace décadas.

Así lo dijo Domingo García, presidente nacional de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC), organización que este año conmemora 90 años de su fundación y que continúa luchando por los derechos de los mexicoamericanos en El Paso.

Ante los concilios de LULAC en El Paso, García dijo que “es increíble cómo a través de los años y después de 90 años de vida de nuestra organización todavía siga esa discriminación y ahora en niveles que no habíamos visto en muchos años”.

“Ahora tenemos una nueva con el ‘cucuy’ de la política, le digo así a Trump, al de la Casa Blanca, que quiere asustar a la gente al decir que hay una emergencia nacional en la frontera”, afirmó.

A manera de reflexión comentó la importancia del papel que juega la organización en el país y más ahora que se están viviendo tiempos difíciles con la nueva administración federal. “Hoy más que nunca está la necesidad de que exista LULAC conformada por su gran equipo de voluntarios”.

Manifestó que LULAC interpuso una demanda en la que están pidiendo al Congreso que quite esa declaración de emergencia porque sabemos que la realidad es que El Paso es una ciudad segura, al igual que el resto de las ciudades fronterizas, desde McAllen hasta San Diego.

“Está claro que Pancho Villa no ha regresado de la muerte para invadir otra vez Estados Unidos”, expresó tras asegurar que ahora son puros refugiados: niños y niñas, familias que vienen a trabajar para mejorar su calidad de vida.

Al hablar de la militarización de la frontera y la construcción del muro a lo largo de la línea divisoria, afirmó que es un error del presidente.

Agregó que actualmente tienen varias demandas en contra de la administración por los abusos hacia la comunidad latina. “Y vamos a seguir peleando en los barrios, en las calles y colonias con protestas cuando veamos una injusticia y veamos discriminación o racismo de cualquier nivel, no importa que sea en Nueva York, California o El Paso, Texas”.

El líder de la organización más antigua y grande de los Estados Unidos manifestó que es importante que la comunidad se movilice. “Somos 60 millones de latinos y si usamos esa fuerza económica, esa fuerza política podemos cambiar la historia de nuestra comunidad”.

Orgullo inmigrante

Indicó que para él es un orgullo, ya que es hijo de migrantes: “mi mamá es de Porvenir, Chihuahua, y mi papá de Coahuila. Soy primera generación texano, hecho en Midland, Texas y quiero seguir luchando en las batallas con gente como la que está aquí en El Paso”.

Tras resaltar que El Paso ha jugado un papel muy importante en la organización y en la historia de los Estados Unidos al tener 5 presidentes de LULAC, más que en cualquier otra ciudad, se comprometió a seguir trabajando por los derechos de su gente.